El Gobierno reconoce que no contabilizaba bien los funcionarios y descubre 300.000 trabajadores públicos ocultos
En un giro significativo, el Gobierno español ha ajustado al alza la cifra de funcionarios, revelando que la plantilla es casi 300,000 más de lo estimado anteriormente. A julio de 2023, el número de trabajadores en el sector público alcanza la sorprendente cifra de tres millones, marcando un récord histórico.
Este ajuste se debe a una modificación en la metodología de recopilación de datos, que ahora incluye a los trabajadores con contratos temporales de menos de seis meses y al personal en formación. Un cambio que arroja luz sobre la verdadera dimensión de la fuerza laboral del sector público en España.
Según la información actualizada proporcionada por Función Pública, se ha producido un incremento de 224,000 efectivos en el Estado y las comunidades autónomas. Este aumento se atribuye principalmente a la incorporación del personal laboral temporal con contratos de corta duración, así como al aumento de 70,000 efectivos relacionados con el personal en formación o en prácticas.
Sindicatos
Los sindicatos sin embargo, consideran que estas cifras aún son insuficientes. A pesar del aumento, el déficit de personal persiste, especialmente en atención primaria y otros sectores. Rosa Atiénzar, responsable de Sanidad en Comisiones Obreras (CCOO), destaca que el refuerzo numérico «se queda corto», enfatizando la necesidad de un plan integral de recursos humanos para abordar las carencias.
A pesar de este ajuste y el aumento en la oferta de empleo público, los sindicatos, como CSIF y UGT, advierten que la situación sigue siendo insatisfactoria. La temporalidad, la falta de personal técnico y administrativo, y el envejecimiento de las plantillas son desafíos críticos.
El nuevo ministro de Función Pública, José Luis Escrivá, enfrenta el reto de gestionar este aumento, además de implementar cambios en los exámenes de acceso y liderar la digitalización de la Administración. La necesidad de una estrategia a largo plazo y la estabilización del empleo público son demandas clave de los sindicatos.
En resumen
El ajuste en la cifra de funcionarios revela una realidad laboral más compleja de lo que se pensaba, con desafíos persistentes en términos de dotación de personal y gestión eficiente en el sector público español.
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